viernes, 29 de octubre de 2010

Este espacio en blanco...

Día de lluvia.

A las dos de la tarde un sol enorme dominaba el cielo, a las tres, todo estaba nublado y el viento empezaba a recorrer las calles, cerca de las cuatro cuando logré pisar tierra segura (el piso de mi habitación) el viento era tal que volaba todo lo que encontraba, qué bueno que no había casi nada en el patio. Mamá ha estado tres días preparando el patio por que decía que llovería ( y yo que no le creía, ayer hizo un día de pleno verano...) pero el clima está extraño. Terminando de almorzar alrededor de las cinco, mamá me dice " va a temblar, y temblará fuerte "... lo dijo la otra vez y tembló. Así que, en vez de estar pegada toda la tarde en el computador, estuve ordenando...
Ordené ropa, ordené lápices, ordené papeles... (debo presentar la postulación a la beca mañana) y por si alguna mosca vuela, también dejé una maletita tipo emergencias...
No le tengo miedo al temblor en sí mismo (aún), más que nada es la inseguridad de no saber cómo reaccionaré yo, puesto que no he estado en temblores fuertes antes. El otro día tembló grado cuatro y cinco también, pero no me alarmo, no los siento fuerte, ese es el problema : no me alarmo ! No corro, sólo espero que pase, como si tuviese una confianza tremenda que pasará...

Pero en realidad nada de lo escrito me motivaba realmente a escribir esta entrada, aún tengo en la mitad de los pensamientos, sensaciones que me gustaría sacar, pero que no logro que se consoliden en palabras, sólo flotan en un espacio en blanco, y con suerte toman la forma de colores, sin formas definidas, pero los sentimientos me dicen más.
En parte es un cúmulo de ideas inconexas, hay de todo: impresiones externas, deseos, monotonía, rutina, colores, anhelos, abrazos, logros, vacíos, cuestionamientos, metas, persistencia, colores, dudas, miedos, confianza, alegría, ilusiones, magia...

Hay algunos días que siento, que las responsabilidades matan la vida, después pienso que en realidad, matan las formas de vivirla.

Finalmente cuando decido cerrar los ojos, al final de un largo día, me acurruco brevemente con mis anhelos y me arropan mis ilusiones, me olvido de existir hasta que por alguna razón abro los ojos la mañana siguiente.


Pd. El dato del día: me compré lápices hoy :) iai !!!

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